sábado, 8 de agosto de 2009

¡MÁS SOBRE EL ANÁLISIS DEL HUMOR Y TODO ESO!

Estaba pensando y no quiero caer otra vez en hablar sobre cosas de la Tele.
No quiero hablar sobre programas, personajes o noticias de la Tele. Pero, lamentablemente lo que mas me sale es eso: hacer un comentario sobre el giro patético del programa de Petinato, adherir a un post muy interesante sobre "Tratame Bien" que me hacer ver que era lo que no me cerraba de esa serie, o el por qué de que Jacobo y/o el Bambino a veces no son graciosos. Tampoco quiero hablar de Zulma Lobato ni de Tinelli, ni del futbol televisado. En fin. Si uno saca esos temas no queda nada.
Eso significa que algo no anda del todo bien. Despues de todo, la vida no solo es la Tele. Algo mas tiene que existir. Por eso me propongo no hablar mas de la tele ni sus alrededores.

Dicho ésto, y continuando con mi análisis del humor, quería hacer una observación acerca de la gente "graciosa" que se imita a si misma. Supongamos que alguien en su grupo de amigos siempre hace comentarios de lo dificil que es su madre/esposo/a/vida en general. Como esa persona es un poco divertida, rápidamente obtiene la risa de los demas.
Luego, lo hace varias veces mas -es decir repite el experimento- y obtiene los mismos resultados. Envalentonado, continua haciendo el papel del gracioso "existencial". Pero en algún momento, el chistecito del problemático no va más. El público no se renueva tan rápido y ya todos se cansan de escuchar el mismo repertorio -con simples variantes de nombres y circunstancias-. Llegado a este punto crucial, al "gracioso" le queda la posibilidad de empezar a implementar una nueva batería de chistes. Pero he aqui el cuello de botella: él no estudio para eso, ni se preocupó en desarrollar su capacidad humorística, tampoco experimentó al respecto, en fin... no sabe como implementar nuevos chistes y salirse del papel que supo conseguir. Es el tipico contador de anécdotas de asados que se encontro con la gloria de casualidad.
Por lo cual esta condenado al fracaso.
Fracasará en repetir el mismo chiste, pero intentando ya no contar algo real siendo el mismo, sino que intentara contar algo gracioso riendose de él mismo y de el mismo contandolo. Es decir potenciar sus chistes riendose el también del chiste, de si mismo y de como lo cuenta, como diciendo.... "uy uy uyuy mira que loco y divertido que soy". Esto es patético y no es gracioso.
AL ver que la gente no se rie, caerá en otro error: exagerara aun mas la situaicón, y tratará de ser gracioso a cada momento, lo que aumentará el grado de patetismo.
Esta gente la descubris cuando te la encontras y a la segunda frase tiró un remate chistoso buscando la risa. Para. Para, viejo. Nadie te pidio un chiste. Quien sos.
El consejo para esta gente es: para la moto. Cambia el repertorio o no intentes ser gracioso a cada rato. El mundo te lo agradecerá.

4 comentarios:

Rodrigo dijo...

Porque le pegas al pobre de D.... Ort...???Igual coincido en un todo con el post¡¡¡¡

Dr. Amor dijo...

Cheeee¡¡¡¡ Por acción u omisión siempre defendiendo a la mafia de Don Julio¡¡¡Basta de crónicas edulcoradas y denuncien los negociados y fraudes futbolisticos del bulonero

La Direccion dijo...

La dirección informa que por problemas técnicos no podrá desarrollarse la columna prevista en los tiempos correspondientes. ESperamos que a la brevedad el señor Rod Conti reanude su vinculo con los lectores. Gracias

Anónimo dijo...

Los lectores quieren saber... donde catzo esta Rod Conti?