miércoles, 14 de mayo de 2008

Confesiones de un Boludo Arrepentido: Rod In Love

Hace un tiempito vi en VH1 (que gran canal), un reality en el que la otrora estrella y líder del grupo Poison, el cuarentón Bret Michaels (el rubio ese con el pañuelo en la cabeza) mostraba su decadencia haciendo una especie de casting entre una veintena de hermosas señoritas, buscando a aquella que realmente la amara y quiera ser su novia.
Con la ayuda de mis buenos amigos Piter y El Cóndor, decidí armar mi propio casting, televisado on line por internet. La idea consistió en poner un aviso convocando nenas aspirantes a estrella, con buenas curvas, dispuestas a desposar a un hombre cualquiera, o sea, yo.
Se presentaron muchas mujeres, y seleccionamos a las 20 mejores, que pasaron al programa.
La competencia implicaba numerosas pruebas, en las que las diosas debían conquistar mi amor, pero con la condición de no llegar al orgasmo. Todos los días, a la noche, decidía la partida de una de ellas, que abandonaba el torneo.
Obviamente que me sentía en la panacea, en la gloria, y en todos los lugares que se imaginan; y esperaba ansioso la gran final en la que me quedaría con una para darle masita.
Fueron eliminadas una a una, hasta que quedaron las dos más hermosas, más preciosas, más fuertes, más de todo, y etc.
Me encantaban las dos, prácticamente que había decidido quedarme con ambas y ese sería el broche de oro del casting; me sentía dominante de la situación, por lo que les dije que tenía preparada una última prueba, mi gran fantasía, el hedonismo a flor de piel: debían besarse, tocarse y todo lo que quisieran, adelante mío.
Las chicas, pobres santas, lo hicieron para complacerme, pero alguien que sabe de esto dijo alguna vez que si una mujer besa a otra, es lo mismo que cuando un animal prueba la sangre del ser humano: jamás podrá olvidarlo y ninguna otra cosa le gustará más.
Así que me pidieron perdón, me dijeron que me querían como amigo, y que nunca me olvidarían ya que gracias a mi lograron superar sus miedos y hacer lo que querían desde que se habían visto por primera vez. Tomaron rumbo desconocido y nunca más las ví.
Así que Piter, el Cóndor y yo pusimos la tele y nos enganchamos con la repetición de Rock in Love, el casting de Bret. Sí, ya se, soy un boludo. Pero arrepentido. Y ya saben, no hagan lo mismo que yo.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

He seguido atentamente a traves de los dias la evolucion de este blog. correctisimo en todos sus aspectos, pero un equipo es mas que la suma de 2 estrellas. deben ensamblarse. decididamente despues de leer la cronica de rod conti, no dudo en expresar que volvio la magia, este es el blog que quiero, picante, con charm, reflexivo y autorreferencial. un viaje a lo mas profundo del dolor. tal vez, solo tal vez, haya una esperanza, una salida. salud señores, se los extrañaba.-

Anónimo dijo...

Es que los autores son creativos desde el más profundo dolor. Y hoy son felices. Necesitamos que pierdan guita, que las minas los dejen, que sean desterrados... Y allí, recién, volverán a triunfar. Parece que la semana que viene habrá polémica. Estaré atento. Gracias Totales¡¡¡¡

Anónimo dijo...

el dr. abelenda perrot es quien yo pienso?? ... el indomable y semental D.A.???.... se está completando el boliche....

Anónimo dijo...

Lo de semental no lo entendí... Me parece que se refieren a otro D.A.
Este se autotitula a sí mismo, GH 07. Gracias Totales¡¡¡